Nada es más frustrante que intentar ver un video o usar tu PC cuando Internet funciona más lento que un caracol en una pista de hielo.
Tenemos muchas soluciones para nuestros clientes para hacer que su conexión a Internet sea más rápida, confiable y segura. Pero ¿qué pasa en casa? Un Wi-Fi inestable y poco confiable es casi seguro que suceda en el momento más inoportuno, como cuando estás a punto de ver una gran película un viernes por la noche.
Aquí están nuestras 7 mejores soluciones para señales de Wi-Fi lentas en casa.
Paso 1: Asegúrate de que tu Proveedor de Servicios de Internet (ISP por sus siglas en inglés) no esté teniendo problemas. La mayoría de los ISP publicarán interrupciones en su sitio web utilizando la red móvil de tu teléfono en lugar del Wi-Fi de tu casa. Puedes pasar a los siguientes pasos si no hay interrupciones ni problemas conocidos.
Nota: Si no has hablado con tu ISP en más de un año, deberías llamar y ver si tienen nuevos planes para darte más ancho de banda por menos dinero. También puedes investigar otros proveedores para ver si han actualizado su red recientemente y pueden ofrecer un servicio mejor y más rápido que tu ISP actual.
Paso 2: Actualiza tu router, especialmente si no lo has hecho en los últimos 2 a 3 meses. Esto restablecerá tu router con las velocidades de conexión más recientes (y rápidas) y asegurará que estés al día con parches de seguridad y otros programas preventivos. También puedes reiniciarlo, apagándolo y encendiéndolo nuevamente. A veces, eso es suficiente para solucionar el problema.
También te sugiero que consigas un nuevo router si el tuyo tiene más de tres años. Busca uno con Wi-Fi 6 y capacidades de banda dual o triple, lo que permitirá que tu router se conecte con múltiples dispositivos sin sacrificar velocidad o ancho de banda.
Paso 3: Cambia el canal. Descarga la aplicación Network Analyzer para ayudar a encontrar el canal más adecuado para tu conexión. Si usas la frecuencia de 2.4 GHz, cambia a otro canal menos “ruidoso”. Cómo hacerlo depende de la marca y modelo de tu router, así que consulta el manual del fabricante para más detalles.
Paso 4: Actualiza a un router de malla. Cuando demasiados dispositivos se conectan, las velocidades de Internet disminuyen. Una opción es obtener un router de malla como los routers Google Mesh, NETGEAR’s Nighthawk Mesh, o EERO Mesh de Amazon. A diferencia de un router tradicional, que emite su señal desde un solo dispositivo, un router de malla emite una señal desde múltiples unidades estratégicamente colocadas alrededor de tu hogar. Actualizar a un router único, más caro como un Nighthawk podría ayudar en hogares más pequeños.
Paso 5: Activa QoS o Calidad de Servicio. Esta función del router te permite priorizar el tráfico y las aplicaciones, como Zoom o programas de juegos. Básicamente, tu router priorizará usos específicos sobre otros. Por supuesto, cómo se hace esto varía según el router, así que tendrás que consultar el manual de tu router para más detalles.
Paso 6: Verifica que no hayas sido comprometido. Si tu red Wi-Fi está abierta sin seguridad o usa WEP, WPA o WPA2, cambia tu configuración de inmediato. Usa encriptación WPA3 (que es la más segura) y desactiva cualquier opción de gestión remota en tu router. Los virus y los ataques pueden consumir recursos y pueden ser la razón por la que tu red se ralentiza.
Paso 7: Cambia la ubicación de tu router. El sótano puede no ser el mejor lugar para guardar tu router. Intenta colocarlo en alto y lo más cerca posible del centro de tu casa, libre de obstrucciones y electrodomésticos, espejos, paredes de concreto y materiales metálicos que pueden hacer que las señales reboten o se bloqueen. Si pones tu router en la pared de tu casa, tu señal solo impactará la mitad de tu hogar. Si tienes un lugar prominente, probablemente necesitarás invertir en extensores de Wi-Fi para el hogar para aumentar la señal.
Si el Wi-Fi de tu negocio es lento, inestable y problemático, puedes solicitar un diagnóstico de la conexión a Internet de tu oficina para ver qué está causando los problemas que estás experimentando. Obviamente, el Wi-Fi de un negocio es más importante que el Wi-Fi doméstico y puede costarte una gran frustración y baja productividad si no se soluciona.
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